Viajeros en la tormenta. II
por favor, lleguen hasta el final del texto....ay, gainsbourg, pequeño diablo.....
Los Planetas resucitan la maldita relación entre música y droga con un CD hecho bajo sus efectos
El disco se edita con un amplio especial de la revista «Cáñamo» que firman críticos y artistas
La polémica está servida. El grupo granadino Los Planetas editan un disco grabado, dicen, bajo los efectos de las drogas. Se acompaña de un especial de la revista «Cáñamo» que incluye diversos artículos de críticos y músicos, entre ellos Pau Riba que titula el suyo «Mi primer tripi», sobre la relación de las drogas y la música.
En la portada aparece Mick Jagger en trance. Las drogas han estado asociadas a la leyenda negra del rock. De Jim Morrison a Sid Vicious o Enrique Urquijo son muchos los nombres que han coqueteado con ellas o que se han dejado la vida en el intento.
Disueltos. El grupo granadino (arriba) ha titulado su nuevo trabajo «Los Planetas se disuelven»
Mañana llega a todos los kioskos de España un especial «Música y drogas», editado por la revista «Cáñamo». Cuenta con 320 páginas, en las que una treintena de firmas analizan las relaciones entre música y estupefacientes, en géneros como el reggae, la electrónica, el folk, el soul, el rock o el flamenco, entre otros. En la portada, aparece la imagen del joven Mick Jagger.
Así explica la elección Moisés López, coordinador del número: «Le escogimos a él porque en su juventud, cuando grabó sus mejores discos, fue el símbolo de una época en la que música y drogas iban muy unidas. Además, nos gustó la imagen: un Jagger en trance, con ojos entrecerrados, vaya usted a saber por qué, no creemos que sea por el cansancio».
Además, la revista incluye un compacto con 45 minutos de música inédita, compuesta por el grupo granadino Los Planetas. Son cuatro piezas: dos instrumentales, dos con letra, todo ello bajo el título «Los Planetas se disuelven».
En una semana
Este material, grabado en una semana, surge de unas sesiones donde el grupo tocó bajo la influencia de distintas sustancias psicoactivas.. Juan Rodríguez, más conocido como Jota, cantante del grupo, explica así el contenido del disco: «No es un álbum al uso de Los Planetas, más bien es un experimento, donde hemos buscado otras perspectivas. La relación del arte con las drogas es muy larga, pero en el fondo, si lo piensas un poco, las drogas son indisociables de cualquier actividad humana..
De nuestro disco, la pieza que más me gusta es la más alejada del formato canción: se llama El lado oscuro de la fuerza , que es un título que describe muy bien la atmósfera que tiene. Dura unos treinta minutos, tiene bastantes sintetizadores, con un ambiente tenebroso, casi siniestro. Se puede decir que aprendimos grabando todo esto».
Será su primer lanzamiento desde «Encuentros con entidades», editado en 2002. Entre el índice del número de «Cañamo», encontramos firmas de críticos consagrados, como Quim Casas, Diego Manrique, Luis Lles , Jaime Gonzalo o Ignacio Juliá.
También aparecen humoristas como Moncho Alpuente y músicos como el catalán Pau Riba («Mi primer tripi») o el madrileño Fabio McNamara, ex pareja musical del director Pedro Almodóvar («La Movida:Sacrosanta Lacra de Lucro»).
Entre lo más llamativo, Christian Rätsch escribe una pieza sobre las drogas en la música clásica y otra sobre su influencia en «In a silent way» (1969), una de las obras maestras de Miles Davis.
El veterano crítico Luis Clemente toma el título de un álbum de Pata Negra («Inspiración y locura») para desvelar que el mundo del arte jondo tampoco es ajeno a los estados alterados de la conciencia..
No se olvida el pop comercial, con un perfil del genial compositor Serge Gainsbourg: titulado «piruletas anisadas, cannabis y polvo de ángel».
Los Planetas resucitan la maldita relación entre música y droga con un CD hecho bajo sus efectos
El disco se edita con un amplio especial de la revista «Cáñamo» que firman críticos y artistas
La polémica está servida. El grupo granadino Los Planetas editan un disco grabado, dicen, bajo los efectos de las drogas. Se acompaña de un especial de la revista «Cáñamo» que incluye diversos artículos de críticos y músicos, entre ellos Pau Riba que titula el suyo «Mi primer tripi», sobre la relación de las drogas y la música.
En la portada aparece Mick Jagger en trance. Las drogas han estado asociadas a la leyenda negra del rock. De Jim Morrison a Sid Vicious o Enrique Urquijo son muchos los nombres que han coqueteado con ellas o que se han dejado la vida en el intento.
Disueltos. El grupo granadino (arriba) ha titulado su nuevo trabajo «Los Planetas se disuelven»
Mañana llega a todos los kioskos de España un especial «Música y drogas», editado por la revista «Cáñamo». Cuenta con 320 páginas, en las que una treintena de firmas analizan las relaciones entre música y estupefacientes, en géneros como el reggae, la electrónica, el folk, el soul, el rock o el flamenco, entre otros. En la portada, aparece la imagen del joven Mick Jagger.
Así explica la elección Moisés López, coordinador del número: «Le escogimos a él porque en su juventud, cuando grabó sus mejores discos, fue el símbolo de una época en la que música y drogas iban muy unidas. Además, nos gustó la imagen: un Jagger en trance, con ojos entrecerrados, vaya usted a saber por qué, no creemos que sea por el cansancio».
Además, la revista incluye un compacto con 45 minutos de música inédita, compuesta por el grupo granadino Los Planetas. Son cuatro piezas: dos instrumentales, dos con letra, todo ello bajo el título «Los Planetas se disuelven».
En una semana
Este material, grabado en una semana, surge de unas sesiones donde el grupo tocó bajo la influencia de distintas sustancias psicoactivas.. Juan Rodríguez, más conocido como Jota, cantante del grupo, explica así el contenido del disco: «No es un álbum al uso de Los Planetas, más bien es un experimento, donde hemos buscado otras perspectivas. La relación del arte con las drogas es muy larga, pero en el fondo, si lo piensas un poco, las drogas son indisociables de cualquier actividad humana..
De nuestro disco, la pieza que más me gusta es la más alejada del formato canción: se llama El lado oscuro de la fuerza , que es un título que describe muy bien la atmósfera que tiene. Dura unos treinta minutos, tiene bastantes sintetizadores, con un ambiente tenebroso, casi siniestro. Se puede decir que aprendimos grabando todo esto».
Será su primer lanzamiento desde «Encuentros con entidades», editado en 2002. Entre el índice del número de «Cañamo», encontramos firmas de críticos consagrados, como Quim Casas, Diego Manrique, Luis Lles , Jaime Gonzalo o Ignacio Juliá.
También aparecen humoristas como Moncho Alpuente y músicos como el catalán Pau Riba («Mi primer tripi») o el madrileño Fabio McNamara, ex pareja musical del director Pedro Almodóvar («La Movida:Sacrosanta Lacra de Lucro»).
Entre lo más llamativo, Christian Rätsch escribe una pieza sobre las drogas en la música clásica y otra sobre su influencia en «In a silent way» (1969), una de las obras maestras de Miles Davis.
El veterano crítico Luis Clemente toma el título de un álbum de Pata Negra («Inspiración y locura») para desvelar que el mundo del arte jondo tampoco es ajeno a los estados alterados de la conciencia..
No se olvida el pop comercial, con un perfil del genial compositor Serge Gainsbourg: titulado «piruletas anisadas, cannabis y polvo de ángel».
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